Hacer cosas difíciles requiere convicción interna, compromiso y esfuerzo constante. Hay pocas cosas más desafiantes que poner nuestros cuerpos en forma. Los contratiempos son inevitables, incluso con un régimen bien planificado de movimiento diario y alimentación saludable. Incluso herramientas como el Apple Watch nos ayudan a trazar nuestros objetivos diarios, fijando nuestra vista en "cerrar el círculo" hacia la aptitud física. La transformación espiritual no es diferente a ponerse en forma física. Jesús nos invita a formas específicas de vivir. En esta serie de cuatro semanas, únase a nosotros mientras exploramos la práctica del camino angosto de la misericordia, la gracia y la esperanza. La transformación espiritual requiere un esfuerzo continuo. Podemos cerrar el círculo hacia una vida espiritual transformadora si continuamos asociándonos y caminando con Jesús para experimentar una vida abundante.